Cualquier persona que quiera escribir debería primero leer. Pero no sólo leer, sino leer bien e incluso aprender a leer, porque lo que se hace en las escuelas no es enseñar a leer sino un tipo de adiestramiento que sólo sirve para 1) crear peones para la industria, 2) crear consumidores acríticos e irreflexivos que crean que la palabra "rebaja" significa "regalo".
Estoy leyendo Entre paréntesis de Roberto Bolaño. Un tipo muerto viene a mí y me dice: mira, todo el tiempo que has pasado creyendo que escribes o, más aún, pensando que lees, mira, es basura. Tíralo todo, dice. Échalo por la borda, no vale, no cuenta. Y como si fuera una lluvia de caspa, pero mucho más agradable, se le caen de la cabeza decenas de nombres de autores: los que hay que leer, los que ya debería uno haber leído, los que hay que leer para saber que no se deberían haber leído.
No me imagino a Bolaño dando clases. No sé si lo intentó alguna vez siquiera. Si lo hizo, debió haber sido terrible. El caso es que su libro es, en el mejor de los términos posibles, uno de los mejores manuales para entender algo así como el panorama literario de Latinoamérica. Ahora ya sé qué quiero leer cuando termine con éste.
domingo, 24 de abril de 2011
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¿Qué quieres leer cuando termines con ése?
ResponderEliminarMe llegará para entonces "El curioso incidente del perro a medianoche", que me recomendaron mis papás.
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